UNA (CORT)-ÉS CENA

(farsa indigesta)

ESCENA PRIMERA Y ÚNICA

Un hombre y una mujer sentados a la mesa… ¿cenando?

(Largo silencio)

CONSTANTINO:

—Le falta sal a esta papa agridulce (con un nada disimulado gesto de desprecio en el rostro).

EMILIA:

—¡Por Dios! ¿Cómo os atrevéis a blasfemar de tal manera tan santa y patriarcal? ¿Acaso no veis a los ángeles que esperan bajo la escotilla las sobras de esta ostentosa comida digna de bueyes?

CONSTANTINO:

—Deja de hablar barbaridades mujer sensata. ¿No ves que aún te quiero?… un poquito. Entiende que tengo la razón. El pollo está mal pintado, le hace falta otra mano. Y no se hable más del asunto.

EMILIA (empezando a lloriquear):

—La comida está buena Arnoldo, vos simplemente sois un gran malagradecido. Yo tan pura y virginal que ningún mal hago a nadie. Hasta maté dignamente a ese bagre dándole primero un baño de espuma, luego le limé las pezuñas y le cepillé las plumas… ¡Dos veces! (comienza a berrear como cochino en un matadero).

(Constantino come desaforadamente y no presta la más mínima atención a su compañera, quien sigue llorando a moco tendido.)

CONSTANTINO (con la boca repleta de comida):

—¡Ya, mujer! ¡Ya! Deja este escándalo que se me va a dañar la digestión, y sabes cuánto hace disgustar eso a los vecinos, sobre todo por estos días en que no están en casa. ¡Qué nobles son nuestros vecinos! Lástima que nunca los vemos por ahí, ¿verdad?

EMILIA:

—Pero, ¿de qué habláis Horacio? ¿Qué porcinos? (sollozando).

CONSTANTINO:

—Pero, por Dios mujer. ¿Cómo que cuáles porcinos? ¿Acaso deliras y no me quieres decir nada al respecto?... ¡Pues, los porcinos, los porcinos! ¿De qué otros porcinos puedo estar hablando?

EMILIA:

—Ah, sí. Por supuesto, los porcinos. Te quiero tanto, Dionisio.

(CONSTANTINO se recuesta en la silla, de manera que ésta se inclina y queda apoyada sobre las dos patas traseras, y pone las manos detrás de su cabeza con gran satisfacción y aire de superioridad)

CONSTANTINO:

—Yo también, mi querida Emilia, yo también… Vaya, vaya, vaya… ¡Pero, qué hambre tengo! ¿Qué hay para la cena?

TELÓN

Fotografía: beautyineverything.com © Jenni